en aquellos dias ella me llamaba desde Berlín
y yo la escuchaba desde mi habitación, tumbada en la cama
su voz tenía fuerza y a la vez suavidad, cada palabra suya se deslizaba por mis oídos
era como si me estuviera leyendo el pasaje elegido de un libro
me decía que quería unos ventanales muy grandes, desde donde nos pudiéramos sentar a mirar la calle
yo quería espacios diáfanos
ella, cojines esparcidos por el suelo
y yo las bicis apoyadas en la pared del salón
muchas flores, montones de ellas
y una nevera con quesos y vino
me alegra tanto saber que la felicidad perfecta estaba allí, en ese rincón que nuestra imaginación construyó, pero también aquí, en este rincón que la realidad nos ha regalado...
ACTUALIZADO:
y hoy para comer, una de nuestras ensaladas favoritas
me encanta vuestra casa... besos
ResponderEliminarDot: Esperamos que algun día vengáis a visitarnos...
ResponderEliminarMe encanta compartir la vida contigo... y me ha encantado la ensalada! Tk
N.
slurp! Qué buena la ensalada...
ResponderEliminarLamarimorena
Oh, sí, la felicidad son cosas concretas!
ResponderEliminarEsa ensalada tiene muy buena pinta.
bss
creo que ya lo dije en un post hace varios meses, pero por si acaso os cuento:
ResponderEliminarla ensalada lleva judias verdes, tomate fresco, zanahoria picada, huevo duro y una vinagreta de aceite oliva, vinagre módena, albahaca, pipas peladas, medio ajo y una lata de anchoas. Añadir luego parmesano y a disfrutar!!