viernes, 9 de diciembre de 2011

un maillot y un moño

Empecé dándole patadas a un balón con muy, muy pocos añitos. Era lo que se solía llamar "un chicazo" (a esas edades lo de marimacho como que suena muy bestia). Recuerdo saberme de memoria la alineación de la selección española de fútbol, la de la Real Sociedad (no, no tengo ningún familiar vasco, así que éste es uno de los grandes misterios de mi vida). Recuerdo jugar con mi padre en nuestro largo pasillo de aquel piso alquilado en aquellos años en Huesca, simular lesiones y que él me aplicara la famosa "agua milagrosa".

Después mi madre decidió apuntarme a gimnasia rítmica a los 8 años. No se si fue en un intento de feminizarme o que todas las niñas del pueblo fueron apuntadas, el caso es que allí me vi yo, con mi flexibilidad cero, intentando hacer el spagat sin que mis ingles se desconyutaran, con un maillot ridículo y con un moño aún más absurdo si cabe. Eso sin mencionar aquellos festivales de exhibición en los que sí, como habréis adivinado, yo estaba en la última fila, allá justito donde nadie me veía.

El suplicio duró casi tres años. Y ahí es cuando llegaron los maravillosos, excepcionales y salvadores JUEGOS ESCOLARES. Pasé varios años practicando atletismo (famoso es mi último puesto en el campeonato de Aragón en la disciplina de salto de longitud, puesto al que indudablemente contribuyeron mis zapatillas Reetruck), balomnao y baloncesto.

Y en este último deporte me quedé hasta los veintipocos donde por una temporada bastante larga dejé el deporte de lado.

Actualmente practico pádel en plan aficionadilla, salgo de vez en cuando con la bici, nado por convencimiento de lamujerdemivida e intento llegar a batir mi récord personal de 50 minutos corriendo. Me siento bien. En realidad, me siento muy bien, y quizá es de los pocos aspectos de mi vida en el que soy algo disciplinada y persistente.

Y a todo esto no se por qué coño he hecho esta entrada, pero creo que se me ha ocurrido esta mañana, fatigándome por el Arga, y como lamujerdemivida está muy insistente con el tema "tienes el blog abandonado", pues aquí va esta entrada sana y autobiográfica donde las haya.

Hala! feliz y deportivo finde.

7 comentarios:

  1. ¿y la foto de cuando hacías gimnasia rítmica??????
    Yo hice hockey hierba.

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  2. A mi se me daban bastante bien los deportes, especialmente el volleyball, donde era el "terror de las nenas" porque pegaba unos mates, que como alguna se pusiera por medio.... jajajaja
    Hace mil años que no hago gimnasia y lo tengo como propuesta para el año que viene (empezaría ya, pero no me apetece nada el pasarme todad las navidades dolorida :p )

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  3. madre mía, maría, ¿tiro con carabina? pues mira, eso me habría gustado también, que yo era muy aficionada a tirar en las casetas de feria

    marcela, te juro que hay foto, estas navidades la cojo de casa de mis padres y prometo colgarla. Cómo mola lo del hockey hierba y cómo se nota que eres del norte, porque lo que es en mi tierra, hierba, hierba... ná

    arlene, bienvenida a mi blog y gracias por comentar. A mi lo del volley me ha puesto siempre mucho, pero mira, en mi pueblo no se "estilaba". Eso sí, cuando puedo, veo partidos de volley playa femenino, ¿y quién no? Ánimo con tu vuelta al deporte, mujer.

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  4. Las cervezas de esta noche viendo EL PARTIDO se considera deporte?
    No hay eggs para colgar la foto...

    besos

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  5. Pues a mí esta entrada me ha encantado. Te he visualizado con el moño y me ha dado la risa, jiji! En ese sentido mis padres han sido siempre muy anarcas: haz el deporte que te dé la gana y pásalo bien! Y aquí estamos, que sin deporte no soy nadie, es un gran invento.

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  6. Yo pasé por un largo etcétera de deportes, entre ellos la gimnasia rítmica. Se me daba horrorosamente mal...será cosa de que lo llevamos en los genes por bollos?

    muaks

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