Lo dije: de este finde esperaba todo o nada.
Y más bien tuve todo.
Debería empezar diciendo que sigo teniendo pelo en la cabeza, digamos que la banda sonora del finde fue pelín más rockera. Alivio.
Debería seguir comentando que el partido de Djokovic-Federer,junto con las cervezas a un euro de la Flaherty tuvieron la culpa de no acudir al ZINENTIENDO. A cambio disfrutamos de un rato bien majico con mi amiguito del alma Albertxu y Club con su Langosta, a las que ya me encargué de decirles lo que se las echa de menos por estos mundos blogueriles.
El sábado había vermú-cumpleaños de la Marimorena. No nos cogió por sorpresa que empezaramos a la una del mediodía y que fueran las 6 de la mañana cuando llegábamos a casa.
Y debería terminar este post denunciando una de las situaciones más patéticas que he vivido en el ambiente zaragozano. Obviaré el tanto por ciento tan elevado de chungas que andaban por allí. No quiero parecer una exquisita, para nada es mi intención menospreciar a nadie. Pero me parece triste y vergonzoso que una panda de tías se metan de ostias al más puro estilo macho ibérico, reproduciendo las mismas actitudes, frases y comportamientos que tanto aborrezco de ciertos tíos. Ver a cuatro polis intentando reducir a una tia que debía ir de farlopa hasta arriba da mucha, pero que mucha pena.
Y que no tengas la mala suerte de cruzarte en su camino...
Veo que el fin de semana dió para mucho... y tu anécdota del ambiente... a mí de ahí ya no me sorprende nada. Un beso.
ResponderEliminarpues sí, no se de qué me sorprendo... siempre digo "es la última vez que vengo, qué pinto yo aquí" pero ahí acabamos tomando una caña... Bueno, no voy a ser tan injusta que alguna vez me lo pasé bien, pero hace taaaaaaanto y creo que ya nada es lo mismo. Un beso.
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