me gusta ir a mi pueblo, allí viví hasta los 18, allí siguen mis padres y algunos de mis amigos de infancia, mis vecinos, mis rincones y mis recuerdos. Me gusta que no haya ruido (o muy poquito), que las distancias sean cortas, que a todas horas te apetezca pasear, saludarte con todo el mundo, reencontrarte, "coger capazos" osease pegarte media hora en la esquina de una calle charrando con quien hace mucho que no ves, beber cerveza (es el sitio donde más cerveza bebo), sentir que mi sobrino puede escapar de madrid a menudo y disfrutar de este pequeño paraíso... No me gusta que me pregunten a todas horas si ya me he casado, si mi sobrino es mi hijo, si tengo novio, que qué poco vienes, que ya eres zaragozana bla bla bla...
Ya estoy de vuelta, sigo de vacaciones aunque no me parece que esté de vacaciones (S., el viaje a estambul estuvo de puta madre pero último año que cogemos vacaciones en junio). Finde dedicado a estudiar y a celebrar que S. cumple 29 añitos.
PD: me arrepentiré de este post tan soso, seguro
PD2: lo de las tias buenas de estas olimpiadas no tiene nombre, las rusas del basket, las del voleyplaya, las noruegas del balonmano... joder!!
Así que de Zaragoza?? Lo suponía ya que charras y capaceas, jajaja.
ResponderEliminarYo también disfruto mucho cuando voy a mi pueblo, aunque ahora con exámenes, universidad, curro,... pues poco.
Te seguiré leyendo! Ciao