un dia cualquiera

Levantarme por la mañana y lo primero lo primero, ponerme las gafas: indispensables, soy miope. Comprobar que el mando del agua fria sigue un poco atascado, con lo cual ducharme es un deporte de riesgo, puedo socarrarme o hacer un truco de magia, convertir mis pezones en diamantes. Empiezan a cansarme los putitos Special K aunque lleven minúsculos trozos de chocolate, sólo me gustan cuando aún están crujientes, volveré al neskuik. Comer verdura, abrir armario, poner pitillos, camiseta y unas zapatillas (umm no tengo zapatos, sólo los que me voy comprando para las bodas etc...). Mi madre se ha cansado de decirme cuándo cambiaré de forma de vestir. Cazadora y palestino pa la noche que hará frio (toma rima). Y la sonrisa, junto con las gafas, elementos básicos para que me vaya medio bien la tarde en el curro. Y ahí es donde se empieza a joder todo: un cambio a destiempo de horarios, un plan de finde jodido y una mala ostiaa que me ha entrao!! Total, que tanto escándalo interior para darme cuenta que la mala ostia, además de hincharme la vena, me pone cachonda. Y ahora, aquí estoy, la mar de relajadita... Ya ves tú, si en el fondo ha sido un dia cualquiera...